A pesar de la expansión de programas asistenciales, el Observatorio de la Deuda Social de la Universidad Católica informa que la proporción de trabajadores en hogares en situación de pobreza aumentó en los últimos años. En 2023, el 32,5% de los trabajadores se encontraban en esta situación, con diferencias marcadas según el sector productivo y la condición laboral.
Entre 2004 y 2012, la proporción de trabajadores en hogares en situación de pobreza disminuyó significativamente gracias a la generación de empleo y la expansión de programas de empleo y asistenciales. Sin embargo, entre 2012 y 2023, a pesar de breves años de bonanza, se observó un aumento en el porcentaje de trabajadores en situación de pobreza.
En 2023, el 33,1% de las mujeres ocupadas y el 31,9% de los hombres ocupados residían en hogares en situación de pobreza. Especificando por sector y condición laboral, se observa que en el sector público, en el sector formal asalariado y en el sector formal no asalariado, las mujeres sufren un menor nivel de incidencia de la pobreza que los hombres. Esta relación se invierte en el sector micro-informal asalariado y casi desaparece la diferencia en los ocupados en el sector micro-informal no asalariado y en los beneficiarios de programas de empleo.
La incidencia de la pobreza varía considerablemente según el sector productivo y la condición laboral del trabajador. En 2023, el 17,8% de los trabajadores del sector público y el 19,7% de los asalariados del sector privado formal se encontraban en esta situación. Por otro lado, la incidencia de la pobreza es menor en los trabajadores autónomos del sector privado formal, con un 4,9%. Sin embargo, esta cifra aumenta drásticamente al disminuir la calidad y la productividad del establecimiento en el que trabajan, alcanzando el 37,5% de los asalariados del sector micro-informal, el 44,2% de los trabajadores autónomos del sector micro-informal y el 78% de los beneficiarios de programas de empleo.
En cuanto a la edad, en el mismo año, el 33,7% de los jóvenes ocupados, el 33,8% de los adultos ocupados y el 21,5% de los adultos mayores ocupados se encontraban afectados por la pobreza. La incidencia de la pobreza según las edades es relativamente similar al especificar a los ocupados según el sector y la condición laboral, excepto entre los adultos mayores beneficiarios de programas de empleo, donde se observa una tendencia a encontrarse en su totalidad en situación de pobreza.
POBREZA Y NIVEL EDUCATIVO
Además, en 2023, continuaron verificándose las brechas según el nivel educativo alcanzado: sólo el 21,3% de los ocupados que culminaron los estudios secundarios vivían en hogares en situación de pobreza, mientras que este valor llegaba al 53,5% de los que tenían secundario incompleto. La diferencia en la incidencia de la pobreza según el nivel de instrucción tiende a replicarse al agrupar a los trabajadores según sector y condición laboral, a excepción de la posible inexistencia de trabajadores autónomos del sector privado formal que no hayan culminado el secundario y entre los beneficiarios de los programas sociales, grupo en el cual casi se ve igualado el nivel de pobreza, independientemente del nivel de instrucción.
El informe de UCA ( https://wadmin.uca.edu.ar/public/ckeditor/Observatorio%20Deuda%20Social/Presentaciones/2024/Observatorio_Nota_de_prensa_Trabajo_y_Empleo_abril.pdf) al analizar la situación de pobreza entre los trabajadores según diferentes atributos, detalla algunas diferencias leves.
