Tomás Balmaceda, filósofo y periodista, “La pandemia fue el virus que nos volvió digitales”
Se puede pensar las generaciones en forma hegemónica? Nos debemos asustar ante el avance de la Inteligencia Artificial? El ChatGPT es un aliado más? De todo esto y un poco más hablamos con el filósofo Tomás Balmaceda.
Es Doctor en Filosofía de la UBA, cruza la filosofía y la tecnología y es docente de grado y posgrado en Universidad de Buenos Aires y UCES.
Ante la pregunta si la filosofía nos permite `pensarnos
´, responde, “Bueno, la filosofía hace muchas cosas, pero una de sus funciones podría ser la auto examinación. Hay una frase que me gusta mucho de un filósofo muy importante del siglo 19 que decía, bueno, cómo pretendemos conocer el Mundo si no nos conocemos a nosotros mismos y, de alguna manera, creo que ese camino de conocernos a nosotros es un camino. Que es largo, que en principio no tiene un horizonte que no tiene un cierre claro y que obviamente lo que nos va generando es también nuevas preguntas y nuevos cuestionamientos. Estamos en una época de mucha aburrición, de muchos cambios en una cierta sensación. De urgencia que también se podría pensar si es tan así o si está un poco de alguna manera, como hormonada, acelerada por por los medios de comunicación o por las empresas, pero es cierto”
Por otro lado, mirar el mundo es ver que el mundo envejece, que vamos a vivir, que las generaciones mutan a pasos agigantados y a la vez vale la pregunta de rigor a Balmaceda: Hay hegemonía en las generaciones? Y el filósofo respondió, “Sí, yo creo que todos caemos un poco en eso. Me parece que tiene varias características muy especiales. El edadismo funciona como forma de opresión, porque quizás si lo comparamos con otras formas de opresión o de prejuicios, por decirlo de otra manera, como por ejemplo no sé la misoginia o digamos el derecho de las mujeres o a los gays. En general, este tipo de prisiones las hacemos con el que es diferente a mí no como que en general hacemos con alguien que que que es distinto a nosotros, lo que nos sucede con el edadismo es que, en el fondo, si todo sale bien, todos vamos a llegar a los 50. Todos vamos a los 60, todos queremos llegar a los 80. Entonces, cuando estamos oprimiendo o haciendo prejuicios o discriminando a las personas que tienen una edad mayor a la nuestra, en el fondo lo estamos haciendo sobre nosotros mismos. El envejecimiento aún nos cuesta. No nos gusta que nos digan viejos, pero la verdad es que lo único que no envejece, lo que está muerto”
El tan trágico el escenario que presenta la inteligencia artificial? Debemos temer?, Balmaceda respondió con contundencia, “Es posible que empecemos a estar más acompañados por máquinas en muchos trabajos y es posible también que nos encontremos con versiones más baratas de las cosas que hacemos hechas por uno que por una máquina. Ahora no estamos a la merced del destino, tenemos que tomar nuestras propias decisiones. Los Estados tienen que tomar las propias decisiones y también las compañías tienen que tomarlas. Y aseguró, “yo creo que va a transformar El Mundo del trabajo, pero no es, realmente nos va a dejar sin trabajo