Inicio / Medioambiente – Información sobre Aeropuertos Argentina y su impacto en el medio ambiente.
A partir del programa Destino Plástico Cero, Aeropuertos Argentina redujo 193 toneladas de plástico de un solo uso en sus operaciones. El volumen equivale al peso de 55 orcas y refleja cambios concretos en la gestión ambiental del sistema aeroportuario.
Resumen
1: La iniciativa se implementó en aeropuertos del país con foco en consumo interno, proveedores y gestión de residuos para Aeropuertos Argentina.
2: El programa se integra a una estrategia más amplia de reducción de emisiones y mejora de estándares ambientales.
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Destino Plástico Cero: qué cambió en la operación
La reducción de plásticos no llegó por una sola medida. El programa Destino Plástico Cero se apoyó en cambios graduales en la operación diaria: eliminación de descartables, reemplazo de materiales, revisión de procesos internos y trabajo con concesionarios y proveedores, especialmente enfocado en Aeropuertos Argentina.
El foco estuvo puesto en los puntos de mayor consumo: áreas comerciales, servicios gastronómicos, oficinas operativas y espacios de circulación de pasajeros. De ese modo, la reducción se volvió medible y sostenida en el tiempo.
Un dato que dimensiona el impacto
Las 193 toneladas de plástico evitadas equivalen al peso aproximado de 55 orcas adultas. La comparación busca dimensionar un impacto que, de otro modo, quedaría diluido en cifras técnicas.
En un sistema que moviliza millones de personas por año, la gestión de residuos en aeropuertos argentinos se convierte en una variable ambiental crítica. Reducir plásticos de un solo uso implica menos generación de desechos y menor presión sobre rellenos sanitarios.
Gestión ambiental más allá del reciclaje
Uno de los puntos centrales del programa es que no se limita al reciclaje. La prioridad está en la reducción en origen, una jerarquía clave en la gestión moderna de residuos.
Esto incluye rediseñar consumos, repensar contratos y revisar hábitos internos. En otras palabras, cambiar la lógica antes de que el residuo exista.
Una estrategia que se conecta con emisiones y clima
Destino Plástico Cero se articula con otras líneas ambientales que la compañía viene desarrollando, como la medición y reducción de emisiones de gases de efecto invernadero y la mejora de estándares operativos reconocidos a nivel internacional.
La lógica es clara: los avances ambientales no funcionan como acciones aisladas, sino como parte de una estrategia integrada que busca reducir impactos en, por ejemplo, Aeropuertos Argentina, enfrentando distintos frentes.
El desafío que sigue
La pregunta de fondo no es solo cuánto plástico se dejó de usar, sino si este tipo de iniciativas logra sostenerse, escalarse y replicarse en el tiempo.
En un contexto donde la presión ambiental sobre grandes infraestructuras es creciente, los aeropuertos empiezan a ser observados no solo por su eficiencia operativa, sino también por la forma en que gestionan su huella ambiental. Aquí, el papel de Aeropuertos Argentina es central.