El sacerdote Justo Ilarraz fue condenado a 25 años de cárcel por al menos 7 abusos y corrupción de menores. Los hechos fueron cometidos mientras Ilarraz era prefecto en el seminario de Paraná y sus víctimas tenían entre 12 y 14 años. Hoy esos hombres tienen 40 años y estuvieron presentes en la lectura de la sentencia. Uno de los fiscales que llevó adelante la investigación, Álvaro Pierola, habló con #TercerTiempo: «La iglesia inició un procedimiento que mantuvo internamente y fue ocultado. A Ilarraz solo se lo corrió y siguió siendo Sacerdote»
IGLESIA Y ABUSO DE MENORES, FISCAL AlVARO PIEROLA «Lo que las víctimas quieren es que Ilarraz deje de ser sacerdote, porque para la iglesia todavía lo es»

